Cada vez son más los papás que vienen preocupados a comentarme que no consiguen que sus peques se concentren y se sienten a trabajar. Son muchos los niños a los que les cuesta mantener la atención cuando les planteamos una actividad. Quizá el problema sea que cada vez les exigimos más, o quizá que nuestro propio ritmo como adultos también les afecta a ellos. En cualquier caso, sea por lo que sea, la concentración es un problema que debemos atajar desde pequeños, sobre todo si queremos que, cuando sean mayores, terminen tus tareas y actividades de forma efectiva.